lunes, 13 de abril de 2020

COVID19 - POR LA DRA. IVETTE PATAKI


Ayer fue mi primer guardia en un área COVID en un hospital, y siento que si hubiera podido grabar un video de cómo es estar ahí como paciente, NADIE saldría de sus casas, ni de vacaciones, ni de peda a la casa del amigo, ni al mercado del mar.
Habían 10 pacientes, la mayoría de 60 años, sí. Pero había una chavita de 22 años. Tuvo un bebé 15 días antes, y supongo que se infectó durante el trabajo de parto, en el hospital.
Así que no, no es solo una enfermedad de viejitos. Primer punto.
Una vez que entras ahí, ya no puedes tener contacto con NADIE que conozcas. Solo ves doctores con traje de astronauta, sin caras, todos escondidos detrás de respiradores y googles.
La única forma de saber algo de los astronautas que te revisan o que te dan medicamento, es leer sus nombres escritos con plumón sobre el traje.


No vuelves a tener contacto con tu familia, ni con tus amigos, al menos hasta que salgas de ahí. Si sales. Ella estaba muriendo de ansiedad, tenía 4 días encerrada, sin saber nada de su bebé o de su familia. Solo que le mandan saludos.
Tuvimos que sedarla, no había manera de calmarla. Estar encerrado, despierto, rodeado de personas conectadas a ventiladores y personas a las que no puedes verles la cara, es horrible. Créanme, lo vi en su cara.
Necesitamos hacer cambios constantes entre enfermería y médicos, es imposible estar por más de 6 horas en ese traje, bañados en sudor, sin poder respirar bien. Por lo que es difícil que el seguimiento sea personalizado con los pacientes, aunque queramos.
Si cumples con la definición, que es muuuy ambigua, pasas directo al área COVID. Así que, aún las personas con otras causas de insuficiencia respiratoria, terminan ingresando, todo es COVID, hasta que se demuestre lo contrario. Así que, créanme, no es buen momento para enfermarse de NADA. Estamos tratando de optimizar el sistema, de adaptarlo, de hacerlo más eficiente. Pero estamos aprendiendo. Todo es nuevo para nosotros. La cantidad de pacientes nos rebasa y esto se va a poner peor.
Peor, por toda la gente que decidió salir de vacaciones, irse a la playa, salir a la peda con los amigos, ignorar la cuarentena. Todos esos contagios van a venir en ola, en la segunda quincena de abril. Todos los vacacionistas de Semana Santa.
Así que, la siguiente vez que creas que por ser joven no te va a pasar nada, piensa en la chavita de 22 años con la crisis de ansiedad que no para de gritar, piensa en los señores de 60 años, y en tus papás. PIENSA, eso es lo que pido.
No necesitas vivirlo en carne propia para cuidarte, no necesitas ver a alguien entrar en un hospital y no volver a saber de él, hasta que sale caminando o incinerado. No necesitas VER para CREER.
Lo único que podía pensar ayer mientras caminaba con mi traje de astronauta ahí dentro, era que, esa área, parece película del Apocalipsis, ojalá pudiera tomar un video para que lo vieran, para que creyeran, para quq hicieran todo lo posible, por no tener que entrar o ver a algún familiar hacerlo. Ojalá les sirva de algo. Ojalá entiendan que hay actividades que de verdad, no son indispensables.
POR FAVOR, QUÉDENSE EN CASA

P.D. Si creen, además, que el manejo se los va a dar alguien experto en terapia intensiva, están muy equivocados. Nosotros ya somos la tercera línea de apoyo. No hay suficientes expertos, estamos convirtiéndonos todos, aún los que no tenemos nada que ver con esa área. Es real.
Y no me avergüenza decirlo, estamos ahí con la mejor disposición de ayudar, de aprender, de entrarle a los madrazos. Pero somos reumatólogos, hematólogos, nefrólogos... ¡no somos expertos! 
Por favor, no saturen más los hospitales.

P.D. 2 Para los que piensan: DEALGOMETENGOQUEMORIR
Sí, solo piensen cómo. ¿Solos? ¿Sin despedirse de sus familias? ¿Con la sensación indescriptible de NO poder respirar? ¿Llenos de ansiedad? ¿Encerrados?
Se los dejo de tarea.


Vía Twitter: @ivette_pataki


No hay comentarios:

Publicar un comentario